LA CRISIS Y DOÑA DESESPERANZA AGUIRRE

LA CRISIS Y DOÑA DESESPERANZA AGUIRRE Qué nadie se equivoque cuando Esperanza Aguirre habla de un adelgazamiento de la administración, es tan mentirosa y torcida como cuando dijo que se iba de la política, utilizando además un momento de debilidad en su salud para dar pena y credibilidad. Y luego ensalzarse con su elección como gran talento dentro de una empresa dedicada, según ella, a tales menesteres. Campaña política personal y solapada. Una comadreja listilla, plena del desparpajo populista y charanguero de las verbenas de Las Vistillas. Lo que busca es echar a Mariano Rajoy, y colocarse ella en el centro del partido y postularse así para presidenta del país. ¡Que horror y qué despropósito! Una Thatcher revenida. De ninguna manera quiere adelgazar la administración en la dirección que una mayoría pudiera pensar, bajando los sueldos a los cargos públicos o disminuir la cantidad de los mismos. No, ella lo que pretende es retornar, aprovechando la crisis, a las esencias más puras del franquismo más detestable. Suprimir las autonomías y otras, y volver al centralismo franquista donde todo se decide desde Madrid, y lo demás, será de nuevo regionalismo y periferia. Ciudadanos de segunda. Le acompañan en la sombra, aprovechando la situación de crisis, y a la búsqueda de los mismos fines involucionistas, la iglesia católica, la patronal y todo su entorno. Creando de nuevo un país de esclavos y vasallos. Y así, todos corriendo a recogerse dentro del aprisco de las iglesias a rezar y pedir a Dios, a las vírgenes, y a los santos por una mezquina mejora familiar. Todo esto es un peligro. Pasos en esa dirección ya estamos viendo muchos. Despertemos para retomar el camino suspendido por mor de la crisis, o si no en menos de dos generaciones, desde la educación reformada, y todo lo social precarizado, caeremos en la vergüenza de encontrarnos de nuevo en aquel mundo oscuro y vergonzante del nacional catolicismo. Volveremos a ser la burla del mundo avanzado y la conmiseración del resto de Europa que nos verá de nuevo como el país más atrasado de occidente, rezando y creando otra vez emigración y miseria a espuertas. Mientras los otros con alegría salen de la crisis, nosotros, tristemente saldremos expulsados de la UE. Eduardo Fernández Rivas Lugar de Fiunchedo; 02-05-2013