jueves, 18 de abril de 2013

LA CRISIS Y LA ALTERNATIVA DE ESTUDIANTES

LA CRISIS DESMANDADA Y LA TORPEZA DE LOS GOBIERNOS ALTERNATIVA DE LOS MEJORES ESTUDIANTES No estaría de más, comprobando la ineptitud perpetua de los gobiernos, el que se encargase a estudiantes de ambos géneros, dentro de los niveles medios y superiores, tanto profesionales como universitarios, trabajos de investigación acerca de esta crisis, y luego ellos mismos proponer soluciones. A buen seguro que habríamos de encontrar esas mentes privilegiadas entre esa gente joven y con ganas de trabajar, que nos pondrían en el camino de la solución. Incorporar de inmediato a aquellos y aquellas más distinguidos por sus hallazgos a los grupos de gobierno, proporcionándoles los medios necesarios para continuar sus trabajos. Sería, en mi opinión, una alternativa válida y que nos llevaría a detectar personas de enorme valía por donde se habría de colar un nuevo sistema para la búsqueda de las mejores y más válidas personas dentro del ejercicio de gobierno. Y aquí no valdría aquello de las ideologías, que si derechas que si izquierdas o que si creyentes o ateos. Nada de eso. Sencillamente el talento demostrado y puesto al servicio público, y valorando a quienes realmente se lo merecen. Desde los centros de educación se irían incorporando nuevos y variados talentos. El consejo de ancianos permanente, ya con experiencia, se iría configurando con el relevo en el transcurrir del tiempo, y así, de esta manera, sería bien difícil el que se nos colasen dentro de los gobiernos pícaros y demás tipos despreciables. Por otro lado, un gobierno de tal manera estructurado dejaría a un lado las polaridades ideológicas y de comportamientos sociales peligrosos de tan funesto recuerdo en nuestro país. Como la naturaleza no escoge donde sembrar el talento, entonces, tanto de la casa del pobre como de la del rico saldrían esas personas capacitadas que habrían de abandonar desde muy jóvenes los tradicionales enfrentamientos ideológicos y de clase, todavía en ellos aún incipientes y dudosos. Se crearía, pienso yo, el germen tan necesario de una sociedad igualitaria que nos llevaría a tiempos mejores y más felices. No olvidemos que los colegios selectos tienen, por tradición y lobismo enraizado, variados y múltiples privilegios. Entre ellos los de colocar a su alumnado en puestos de todo tipo de responsabilidades, incluidas las cercanas a los gobiernos, a la espera de subir los escalones y llegar a los máximos niveles. También de aquellos dentro de la dirección de las grandes empresas de puerta giratoria y que además actúan como lobis o grupos de presión. Nuestro plan acabaría con todo ello dando lugar a la igualdad de oportunidades y a la instauración de la verdadera democracia. Eduardo Fernández Rivas Lugar de Fiunchedo;18-04-2013

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