domingo, 10 de mayo de 2015

LA BERREA ESPAÑOLA

La política española de berrea La casta política española inicia su andadura municipal y autonómica. Como salvajes animales en periodo de berrea y echados al monte, se despachan a gusto entre ellos, despellejándose a la búsqueda difícil del triunfo propio más suculento. La falta de dignidad, inserta en los improperios y descalificaciones que se arrojan a la cara, pone ya de manifiesto la clase política que en general tenemos. Como manada desmandada de salvajes ciervos rojos, tratan de marcar su territorio donde, tras el triunfo, obtendrán todo el placer que ello sustenta. Luego, perderán las astas que volverán a reproducirse para la próxima berrea de elecciones. Controlando, como camuflados reptilianos de fría sangre, el harén social durante los años que dure la legislatura. Imputados, procesados, sospechosos de todo tipo de delitos públicos, continúan presentándose con una cara tan dura, que ofende a la dignidad social e individual de manera profunda. En A Taberna do Croio, estamos como de costumbre, cuando tratamos estos temas, escandalizados hasta la médula de estas y otras cosas, tan propias, por otro lado, de países, digamos, en la periferia de lo políticamente decente. Entre viejos siseantes, guerreros del antifaz, lindos con ínfulas, y gamberros descamisados, entre otros y otras, se mueve el ambiente político español sin el menor nivel. Prometiendo aquello que unos no han cumplido jamás, y no han de hacerlo ahora, y otros: pues ya lo veremos. Aunque a estos últimos debemos darles una oportunidad. Los recalcitrantes ya la tuvieron, y traicionándose a si mismos, y a la sociedad con un descaro mayúsculo, debieran por vergüenza, si la tuvieran, hacer mutis por el foro y desaparecer de la arena política con las oreja gachas, y con la justicia verdadera e independiente, investigándoles y con premura. Probablemente, y por lo que sabemos, muy pocos y pocas se salvarían de la quema. Eduardo Fernández Rivas Lugar de Fiunchedo-Sada, 09-05-2015

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