Comadreos políticos
Hartos, cansados,
aburridos y crispados es como nos tienen las tertulias políticas mediáticas.
Tanto pronóstico y vaticinio propio de arúspices trasnochados y sin la menor
imaginación y seriedad. El asunto de la investidura de Mariano Rajoy es algo ya
más que vomitivo por pura escenografía inclusa en el fachendoso modelo regio,
pero propia de teatro de pueblo. Todos sabemos que será una sesión fallida, que
por demás no conlleva pacto alguno de gobernabilidad.
Comadreos entre esas
castas políticas con sus representantes de ambos géneros que más pareciese
cacareo de corral gallináceo que algo serio y comprometedor. La ciudadanía ha
hablado y muy clarito. Abomina del bipartidismo y quiere que gobiernen todos
unidos, respetando las diferencias con pactos adecuados e inteligentes. La
ciudadanía también en sus reuniones familiares o entre amigos, respetándose en
sus diferencias ideológicas continúan con sus amistades tras la más o menos
acalorada discusión o debate, exceptuando claro está a los recalcitrantes e
intransigentes que a hierro y fuego pretenden imponer su criterio como único y
verdadero. Suelen quedarse solas ese tipo de gentes. Los personalismos
políticos cargados de celos, envidias, y rabias en esa misma línea de
contumacia, no permiten sensatos comportamientos ni acuerdos. Por lo tanto esas
gentes nada tienen de políticos, aunque así equivocadamente se les llame. La
verdadera política debe estar regida y llevada por cerebros sensatos y con
talento y nunca por caprichosos e inútiles que es lo que en general está
pasando. La alternativa de izquierdas y alguno más, lo mismo que una sabrosa
salsa francesa, en la opinión unánime de los miembros de “A Taberna do Croio”,
sería lo adecuado y tranquilizador. A tenor de sus hechos ya veríamos la
duración de tal gobierno. Pero por favor que se vayan o se evaporen los
recalcitrantes y nos dejen en paz, eso sí, con la puerta abierta para que
entren nuevos ejemplares más válidos y coherentes. La situación actual da asco
y vergüenza ajena.
Eduardo Fernández Rivas
Lugar de
Fiunchedo-Sada; 23-08-2016
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