TARJETAS OPACAS...

TARJETAS OPACAS O EL DESFALCO Amos sin corazón y cuerpos sin alma. Señores del desfalco y del saqueo. Indignidades cargadas de mezquindad y desprecio hacia sus semejantes. Monarcas despreciables convertidos en vampiros insaciables. Oligarcas de pretendida democracia encubierta en una falacia de propaganda infinita en compañía de banqueros y demás poderosos. Desde los niveles jurisdiccionales más bajos y hasta los superiores, pasando por los de en medio, y de manera piramidal se repiten ese tipo de comportamientos, donde el saqueo oculto e implícito es la práctica habitual de todos nuestros mandatarios de todo tipo. Como el amo inclemente quien tras la comilona y entre eructos, de un manotazo limpia la mesa de la que únicamente salen esparcidas algunas indecentes migajas que servirán de alimento miserable a sus perros, quienes ante la escasez se las disputan con saña. Así también nuestros gobernantes, tras el saqueo multiforme nos permiten acceder a derechos pírricos, pensiones irrisorias, y sueldos infames. Migajas inmerecidas. Enseñoreándose de un erario público ajeno a ellos y recaudado sin esfuerzo, pero fatigosamente conseguido ese monto por todos los exprimidos trabajadores y trabajadoras, eso es lo que este país está sufriendo desde el inicio de una prometida, pero jamás y estratégicamente, nunca consolidada democracia. Dictaduras, oligarquías o monarquías ya sabemos, una vez instaladas lo que son, y generalmente las sociedades, de mil y una maneras luchan contra ellas. Lo peor es lo que tenemos en España. Jamás fue una democracia, en bautizarla así nos colaron el fraude. Antes robaban cuatro pero ahora y camuflados roban todos y todas. Nos la han metido torcida y durante casi cuarenta años… ¡Pobre España! De nuevo y en menos tiempo, de piel de brioso toro a la miserable y hambrienta “Vaquilla” de Berlanga, ya moribunda tras el pinchado y esquilmado. ¡Una desvergüenza! Eduardo Fernández Rivas Lugar de Fiunchedo; 21-10-2014