jueves, 16 de octubre de 2014

POLÍTICA ESPAÑOLA; DESVERGÚENZA Y OTRAS

TARJETAS FANTASMA Y MÁS Acabo de hablar con alguno de mis contactos en New York, y es bien triste el escuchar toda una serie de comentarios de todo tipo en los diferentes medios, encaminados al descrédito de la política española y derivados, y de todos sus representantes. Ellos mismos se han encargado con su comportamiento despreciable de echar abajo el buen nombre que durante años mostraba este así abochornado país. Nadie entiende en EE.UU el que una vez descubiertos los fraudes y estafas sus pícaros beneficiarios continúen en la calle, y la mayoría en sus cargos. La conversación telefónica mantenida hace unos momentos con New York me ponía los pelos de punta, al tiempo que me estremecía de vergüenza y rabia. ¡Qué un montón de desvergonzados acaben con el buen nombre de un país no tiene perdón! ¡Y qué todavía tengamos que verles pasearse como si nada, y aún algunos de ellos desvergonzadamente esgrimiendo su inocencia! ¡Vamos, es como para abofetearles! La mayoría de la ciudadanía de este país aún no tiene conocimiento de estas cosas tan terribles y nefastas, y con razones sobradas, que sobre nosotros se dicen fuera de nuestras fronteras. Aunque solo fuese por ese desprestigio al que esas gentes nos han sometido sería ya suficiente delito como para, aún antes de devolver lo robado, enviarles a la cárcel. La celda te hace humilde. Y que nadie me venga con la presunción de inocencia después de lo que ya se sabe. Los tiempos de la judicatura son unos, y excesivamente lentos por estrategias interesadas, y los tiempos sociales son otros. La sociedad en una democracia consolidada es quien manda, y queremos mandarlos y sin más demora a la cárcel. ¡Ya está bien, cada día nuevos escándalos políticos y combinados de todo tipo, y aquí no pasa nada! La conclusión que se extrae en el extranjero es que España no es un país serio… Me consta que el país lo es, pero sus representantes no ¡qué triste! Eduardo Fernández Rivas Lugar de Fiunchedo; 16-10-2014

No hay comentarios: