Respuesta de Hollande a los antentados de París

Atentados en París y su adecuada respuesta Yo, que lo mismo que los componentes al completo de “A Taberna do Croio”, soy una persona de paz, siguiendo aquel refrán que dice que se cazan más moscas con miel que con vinagre, puedo comprender que la reacción de François Hollande de bombardear Raqqa, la admitida capital del eufemístico Estado Islámico, ISIS, DAESH, o como quiera que lo llamen, en respuesta adecuada a los atentados de París durante la noche del viernes día 13 de noviembre. No estaría de acuerdo con tal bombardeo si un grupo radical y violento derivado de cualquier ideología, pero sin estado, fuese quien cometiese tales actos de vandalismo criminal. No es el caso, El ISIS proclama como capital de su estado a la ciudad de Raqqa en Siria, por lo tanto es un estado, o ellos así se consideran de manera unilateral. Ese estado islamista ordena, al reivindicarlos, los atentados de París como otros muchos. Resulta por lo tanto, y con tales hechos, una declaración de guerra incuestionable. De tal manera el estado agredido, Francia, y en su misma capital, tiene derecho a la legítima defensa, y aplicar entonces la justa y necesaria, y aunque dura, ley del talión, en la que se mueven, por otro lado, las maniobras terroristas del DAESH. No estamos ante un grupo más o menos organizado como era Al Qaeda y otros, que de manera abierta al menos, no financiaba como estado sus actos criminales. Eran células dispersas que se autofinanciaban. Terrorismo en estado puro. Contra este grupo liderado en su día por Ben Laden, hubo una respuesta equivocada, y estratégicamente cargada de intereses occidentales múltiples. El resultado de tanta torpeza, avaricia petrolífera, y soberbia militarista en Irak, Afganistán, Siria, y otros, desembocan en el estado de cosas actual. Políticos que piensan más con los caprichos del estómago y el umbilicum que con la cabeza. Insisto, de todas maneras, Francia ha sido agredida por un estado. Tiene derecho por lo tanto a la justa respuesta en la que todos debemos estar. Eduardo Fernández Rivas Lugar de Fiunchedo-Sada; 16-11-2015