martes, 1 de octubre de 2013

DESAHUCIO EN EL PALACIO DE LA ZARZUELA Y TERREMOTO EN EL DE LA MONCLOA

BOBADAS DE CORONA REAL Y CASPA CONSTITUCIONAL Qué si el rey por aquí, qué si el rey por allá, qué si la cadera y la rótula, qué si el príncipe, que si la caza en Botsuana o el asunto Corinna. ¡Pero en que país de mierda vivimos! Conversaciones casposas y anacrónicas que definen a nuestro sistema particular español como algo tan pasado como el cuerno de caza medieval. Ya está bien de periodistas y medios sometidos y aduladores de un personaje de ópera bufa como es Juan Carlos Borbón. ¡Qué si abdicación qué no abdicación! Una patada en el culo y a trabajar como todo dios para ganarse las habas. Estamos hartos los españoles con sentido común y evolucionados social y culturalmente, de tanta bojiganga regia y palio católico impuestos en colegios concertados. Queremos un país moderno y dentro del progreso más adecuado a nuestros tiempos. Nos sentimos ahogados por estos personajes dentro de un sistema que lastra el progreso necesario y propio de una ciudadanía que por debajo de los cincuenta años ya no entiende este tipo de cosas tan antiguas y perniciosas. Estamos hartos de los multiformes dinosaurios fuera de contexto, que nos asfixian impidiendo que nos situemos en la cronología que nos corresponde. Franco en espíritu y bajo un palio descolorido y fantasmal todavía recorre este infeliz país a lomos de un desdentado Babieca como una macabra imagen deshilachada revestida del más negro nacional catolicismo. La gente más joven, y preparada como nunca hubo en este país, ya no se encuentra cobijada dentro de una carta magna anquilosada, y que pertenece a una época por ellos superada. Aprisionados en esa coraza de corte medieval se sienten desconsiderados e ignorados. Un país en donde la evolución social de todo tipo no combina con el corsé de una constitución obsoleta y nacida dentro de unas especiales circunstancias ya muy superadas. Los de arriba no consienten el cambio ya que sería lo mismo que echarles fuera, y dar paso a la gente nueva y con nuevas y brillantes ideas. En estos últimos treinta y cinco años solo vemos las mismas caras, aunque ya bien canosas y deterioradas, en los puestos y cargos de decisión. Como si Franco se multiplicase tras su muerte en infinitos fantasmas que penetrasen a cada una de esas personas, colocándonos así, a todos, en un baile macabro dentro de un infierno fascista distribuido en los representantes del sistema. ¡Estamos hartos! ¡Queremos cambios sustanciales y contundentes! ¡Monarquías fuera! El próximo desahucio esperemos que sea en el palacio de la Zarzuela ¡Queremos ser modernos y actuales! La sociedad en su mayoría ya lo es, el multiforme y casposo poder no, ni le interesa. Eduardo Fernández Rivas Lugar de Fiunchedo; 29-09-2013

No hay comentarios: